De caras lisas, suaves, por fuera. Por dentro definido, de estructura homogénea, constante.
De colores, transparente. Natural, sintético.
Valioso, caro, raro, único. Pequeño, gigante.
Cristalino, amorfo. Con clivaje, maclado.
Duro, frágil. Talco, diamante, extremos.
Refractor, brillo. Reflejo, centro, simetría.
Así es un CRISTAL.
Así soy YO. Te invito, deslumbrate…

domingo, octubre 21, 2007

FAMILIA


Las hay numerosas, casi multitud, con tantas ramas del árbol que si falta una hay otra de donde agarrarse. Y las hay diminutas, concebidas a la mínima expresión, con roles repetidos por falta de personajes.
Las hay de un solo color porque buscamos el amor en quienes se nos parecen. Y las hay mezcladas, arco iris, porque los genes no saben de razas ni de geografía.
Las hay legalmente constituidas, ante dios y ante la ley, porque nos gusta seguir las tradiciones y complacer a los mayores. Y las hay clandestinas, ensambladas, sin contrato, porque los afectos no necesitan libreta y en todo caso no existen garantías de que unas funciones mejor que las otras.
Las hay biológicas porque la suerte nos hizo tierra fértil. Y las hay de la vida porque fuimos amplios, de corazón y de criterio.
Las hay planeadas durante años, con fiesta y video de casamiento. Y las hay espontáneas, surgidas del deseo más profundamente guardado dentro de nosotros.
Lo cierto es que sin importar como, todos venimos de una. La familia es el origen. De ella nos nutrimos para crecer y cuando estamos listos salimos al mundo con el propósito de seguir los pasos de nuestros padres.
Porque la familia es también nuestro destino, hacia donde vamos, para perpetuarnos. Es nuestro grano de arena en la playa inmensa de la vida.
SANDRA 19/10/2007

1 comentario:

Crispín dijo...

Muy lindo Sandra.
Te dejé un comentario un poco más extenso en el blog de Cruzagramas.