De caras lisas, suaves, por fuera. Por dentro definido, de estructura homogénea, constante.
De colores, transparente. Natural, sintético.
Valioso, caro, raro, único. Pequeño, gigante.
Cristalino, amorfo. Con clivaje, maclado.
Duro, frágil. Talco, diamante, extremos.
Refractor, brillo. Reflejo, centro, simetría.
Así es un CRISTAL.
Así soy YO. Te invito, deslumbrate…

jueves, abril 26, 2007

PROFUNDA SEDUCCION



Me zambullí y el frío me congeló los miedos.
Y me sentí segura, protegida por sus muchas inmersiones, por su vida de sal.
Descendimos poco a poco para que mi cuerpo se adaptara a ser comprimido. Compensamos, sincronizamos, dialogamos con las manos. Me dio indicaciones, me evaluó, me aprobó y por fin me propuso disfrutar.
Fue como flotar en el espacio, 20 metros de profunda irrealidad, un paisaje familiar y a la vez exclusivo.
Ojos mirones por todas partes, formas que escapaban, vida original. Verdes como árboles, rojos intensos, colores definidos a pesar de la poca luz. Azul por todas partes y la regla de oro que prohíbe tocar.
Nos impulsábamos juntos, apenas separados, gozando compartir algo nuevo, casi prohibido.
Atrapó unas antenas largas que me rozaron las piernas y me dejaron un rayón. Su mirada se refractó a través del cristal con actitud consoladora y empezó el cortejo, sin que me diera cuenta, sin ser parte del acuerdo.
Me tomó la mano helada y aleteándome hacia él desplegó el escenario. Su cuerpo se pegó al mío y un destello de calor nos imantó. Me moví cómoda, relajada; su brazo lo percibió y aprovechó el momento. Me sujetó por la cintura, me pegó a él y me llevó a lo más profundo. Me ofreció mil maravillas, me asombró de mil maneras y me soltó para volver a abrazarme. Me tocó seguro, sus manos sobre mi piel de neoprene, me sacó el regulador y lo reemplazó por su boca. Traté de no pensar en la falta de respiración, su lengua empujaba burbujas hacia mi garganta; las tragué, me entregué, me perdí. Era mujer, era sirena, una diosa atrapada por su Poseidón.
Y allí en el abismo de sus dominios, la adrenalina inundó todo y me dejó tendida, ahogada, casi muerta.
Mi mente quiso volver, lo empujé con los átomos de conciencia que me quedaban, lo separé de mi, recupere el ritmo, me alejé.
Trató de contenerme nuevamente pero ya no había sorpresa. Tampoco oxígeno.
SANDRA 26/04/2007 (dedicado a Alina, para que cumpla su destino de ser SIRENA).
Alina es sirena,
las aguas claras la empujan
a profundidas azules.
Alina es torrente,
de burbujas y espuma
absorve su fuerza.
Alina es movimiento,
brazadas de deseo
la devuelvan a la playa
y a él, que la espera
imaginando el placer
del encuentro.

2 comentarios:

alina dijo...

Gracias Sandra. Sin palabras.

alina dijo...

Son muchas mas que gracias Sandra por dedicarme este intrigante texto

abrazote,
ALU